4 feb 2013

Carta nunca enviada

Busco refugios para escapar al absoluto
suspenso de tu ausencia.
Está abstinencia del no tenerte
del no poder frecuentarte
del visitar nuestros sitios para hallarlos corrompidos
(por el silencio que ayer fue risa o llanto),
del volver sobre mis pasos para encontrar un vacío a mi lado
donde antes solías estar examinándome
con tus miedos absurdos y fascinantes
y tus modos de niño bien amado,
que súbitamente entristece de forma absoluta.
Y ahora me veo a mi misma,
escribiendo múltiples cartas,
múltiples manuscritos,
que quisiera dedicarles
a tantas personas que ya no están
a tantas personas que nunca quise que estén
y a vos, que como el primer amor me dejás en el frío
del tener que existir
redescubriendo lo maravilloso
que fue cada instante
en que las promesas guiaban mis pasos.
Me consuela tu ausencia,
y aún más tu olvido
pues así no te importará
mi partida.

Desmemorias

Desmemorias
de deseos ahogados
en vasos de vino.

Sobrevienen pequeños retazos:
Frío en los huesos
y soledad en todas partes.

Cada rostro volteado
una nueva muestra
de otra vida que siempre
elegirá ser ajena...

Sollozos de un niño que se a extraviado,
demonios lo buscan:
Elijo estar perdido
aun en el miedo y el olvido,
aun cuando no puedan dejarme ir.


3 feb 2013

Canto II.

Añorando la luz desde las sombras,
una mujer de cantos oscuros
se enceguece desde el miedo y el encanto,
ante la pluralidad de colores
y ante sus propias confesiones.

- El alma es la sombra de los vivos,
que proyecta falacias que dicen ser recuerdos
de años que dicen ser mejores... -

La mujer recuerda
a la niña que era
y a la tristeza
mil veces negada
que escribe
desde sus manos.


Desencuentro

Desde lo profundo de un mar despierto,
desciendo y asciendo en espasmos,
la textura de tu piel vuelve junto al dolor y a la asfixia.
-Todo es lo mismo-. Te escucho gemir.
-Te amo-.

Canto I

¿Qué pasó
con el silencio de la espera
y esos rumbos fijos
que trazaba el destino?

¿A quién llorar ahora?

¿A qué ángel de la noche o del día debo narrar mi dolor?

Cuando las sombras de la desgracia,
cual furias,
descienden destrozando todo;
para instalarse satíricas
como una misa de cirios negros frente a mis ojos.

Y a pesar de mis llantos
las luces nocturnas
ennegrecen los mantos sacerdotales,
y el culto erróneo
bautiza mi carne recién nacida
en los vinos de la lujuria;
frutos rojos de Baco.